Libros del autor Chesterton, G. K.
Gilbert Keith Chesterton (Londres, 29 de mayo de 1874-Beaconsfield, 14 de junio de 1936), más conocido como G. K. Chesterton, fue un escritor y periodista británico de inicios del siglo XX. Cultivó, entre otros géneros, el ensayo, la narración, la biografía, la lírica, el periodismo y el libro de viajes. Se han referido a él como el «príncipe de las paradojas». Su personaje más famoso es el Padre Brown, un sacerdote católico de apariencia ingenua, cuya agudeza psicológica lo vuelve un formidable detective, y que aparece en más de cincuenta historias reunidas en cinco volúmenes, publicados entre 1911 y 1935. Chesterton escribió alrededor de 80 libros, varios cientos de poemas, alrededor de 200 cuentos e innumerables artículos, ensayos y obras menores. Al comienzo de su carrera se hizo conocido por sus artículos periodísticos, y dio un gran salto cuando publicó su primera novela El Napoleón de Notting Hill (1904), la cual inspiró a Michael Collins en su defensa irlandesa ante los ingleses. A ésta le siguieron otros libros de crítica, como "Dickens" (1906) y "G.B. Shaw" (1909). Iba perfilando así sus opiniones, que exponía con un aire acentuadamente polémico y no exento de humor. Combatía todo lo que consideraba errores modernos: al racionalismo y al cientificismo oponía el sentido común, la fe y la filosofía medieval, en particular la de Tomás de Aquino; a la crueldad de la civilización industrial y capitalista, el ideal social de la Edad Media, que para él se traducía modernamente en el ideal distributista. Tras las huellas de una obra titulada "Herejes" (1905), Chesterton publicó tres años después "Ortodoxia" (1908), que refleja la historia de su evolución espiritual (que más tarde lo llevaría al seno de la Iglesia católica). Su actitud apologética se refleja en otra obra de esos años, titulada "La Esfera y la Cruz" (1910). Su actitud ante los problemas sociales la definió en "Qué está mal en el mundo" (1910). De 1908 data su novela más conocida, El hombre que fue jueves, una alegoría sobre el mal y el libre albedrío. En 1912 compone "La Balada del Caballo Blanco", extenso poema épico sobre el rey Alfredo el Grande y su defensa del reino de Wessex contra los daneses el año 878, y del cual C. S. Lewis sabía muchos versos. J. R. R. Tolkien, que en su juventud lo consideraba excelente, en una carta a su hijo comenta que lamentablemente G. K. Chesterton, con toda la admiración que le merecía, no conocía nada sobre lo nórdico. En 1922 publicó Mi visión de Estados Unidos, fruto de su primer viaje a Estados Unidos y Canadá. De 1925 es El hombre eterno, que versa sobre la Historia del mundo, y está dividido en dos partes, la primera trata sobre la humanidad hasta el año 0 y la segunda desde ese año en adelante. Este libro nació como reacción a uno publicado por H. G. Wells sobre la Historia de la Humanidad, al cual, tanto Chesterton como Belloc, le criticaban que de sus cientos de páginas, las dedicadas a Jesús eran ínfimas. Algunos afirmaron que El hombre eterno fue su libro más trascendente a causa de su influencia en literatos como C.S. Lewis y Evelyn Waugh. Sus obras son frecuentemente editadas en otros idiomas. En Argentina su pensamiento ha adquirido un auge todavía mayor desde finales del siglo XX, dadas las constantes reediciones y la aparición de obras desconocidas para el público de habla hispana: Mi visión de Estados Unidos, La Iglesia católica y la conversión, De todo un poco, La Tierra de los Colores, La Nueva Jerusalén, Cien años después, etc. |